Vivimos en una sociedad líquida, misma que consume todo a su paso sin darse cuenta, tal es el caso de las personas y la manera en la que entre indivíduos hemos llegado a devorar la esencia de otros con tal de sentirnos satisfechos, abandonado la importancia de la conexión entre sí y fingiendo que una mera conexión sexual bastará para satisfacer nuestras necesidades y deseos ...
¿Tú tienes una buena canasta básica?
En algún momento nuestra conexión se perdió, perdidos en besos bailamos en un agujero de deseo que lentamente perdió el interés en conocer el final y quiso olvidar el principio, es así como de ser íntimos nos convertimos en frecuentes, poco a poco la distancia personal y la cercanía carnal se convirtió en ir al mercado cada semana, poco a poco se terminaba la leche, así que la diluimos hasta disolvernos en ella volviéndonos veganos que pecaban en ocasiones, hasta que caducamos y el “te deseo” estaba disfrazado como etiqueta negra de exceso de grasas saturadas, eventualmente se terminó la despensa y dejamos de ir al mismo mercado.
-vanessalas
